La evaluación de la calidad biológica del suelo se ha convertido en un criterio importante para valorar el manejo del suelo, usando bio-indicadores como los artrópodos edáficos, permitiendo la conservación de un recurso valioso para la seguridad alimentaria. La presente investigación busca evaluar la biodiversidad de artrópodos edáficos en suelos agrícolas bajo manejo orgánico y convencional en el cultivo de cacao. Para esto se eligieron dos sistemas, el Sistema Agroforestal de Cacao (SAC), bajo manejo orgánico y la Plantación Clonal de Cacao (PCC), bajo manejo convencional, ambos en el campus de la Universidad EARTH, Costa Rica. En cada sistema productivo se evaluaron 30 puntos de muestreo, de los cuales se extrajeron los artrópodos edáficos y muestras de suelo para su análisis; los artrópodos fueron extraídos mediante trampas Berlese, y fueron identificados y cuantificados. Con los valores obtenidos se calculó el porcentaje de abundancia de cada grupo; los valores totales se correlacionaron con propiedades físico-químicas; además, se relacionaron con el índice eco-morfológico de cada taxon, para estimar el valor de QBS-ar por sistema. Los resultados obtenidos muestran que SAC fue el sistema más rico en artrópodos (26 grupos), mientras que la PCC presentó la menor cantidad (17 grupos); los artrópodos más abundantes en ambos sistemas fueron colémbolos (19 % y 20 %), formícidos (17 % y 16 %), sinfílos (9 % y 13 %) y ácaros (13 % y 16 %), respectivamente. Pseudoescorpiones, formícidos, quilópodos escolopendromorfos y ácaros gamásidos presentaron una correlación negativa con la densidad aparente del suelo y la concentración de limo; además, estos grupos presentaron una correlación positiva con la materia orgánica y el carbono, ya que en este grupo figuran principalmente descomponedores de materia orgánica. El análisis de la varianza del índice QBS-ar mostró diferencias significativas entre los dos sistemas productivos (p<0.05), identificando a SAC con un suelo de muy buena calidad biológica, mientras que a PCC con una buena calidad. Estos resultados muestran la eficiencia de la artropofauna como bio-indicadores de calidad de suelo. Se recomienda evaluar el método en diferentes sistemas de cultivos, para observar correlaciones entre propiedades físico-químicas y el conteo de artrópodos edáficos.

Evaluation of biological soil quality has become an important criterion used to assess agricultural soil use and management, utilizing bioindicators such as soil arthropods. This evaluation highlights agricultural soils as a valuable resource that need conservation to ensure long-term sustainability and food security. This study investigates the evaluation of soil arthropod biodiversity in organic and conventional cacao plantations. Two cultivated systems were selected, the Integrated Organic Farm, managed organically, and the Clonal Cacao (Academic Crop Farm), managed conventionally, in the EARTH University campus, Costa Rica. In both systems 30 samples were collected and soil arthropods were extracted using modified Berlese traps as well as soil cores for physical and chemical soil analyses. Percentage of abundance of collected arthropods was calculated and individuals were identified. Correlation analyses of percent abundance and soil physical chemical properties were evaluated. The eco-morphological index for each taxonomic group was established and the QBS-ar index value was estimated. Results show that the cacao agroforestry plantation in the Integrated Organic Farm, had a higher taxonomic richness of arthropods (26 groups) compared to the Clonal Cacao plantation, which had a lower taxonomic richness (17 groups). Most abundant taxa in each cacao plantation were Collembola (19 % y 20 %), Formicidae (17 % y 16 %), Symphyla (9 % y 13 %) and mites (13 % y 16 %), respectively. Pseudoscorpions, ants, Chilopoda (Scolopendromorpha), and mites demonstrated a negative correlation with apparent soil density and concentration of silt particles. These groups, which are largely decomposers, demonstrated a positive correlation with the quantity of organic material and carbon content. An analysis of variance with the QBS-ar Index showed significant differences between the two plantations (p<0.05), where the biological soil quality was determined to be of very good quality in the Integrated Organic Farm and good quality in the Academic Crop Farm. These results support the use of soil arthropods as bioindicators of soil quality. We suggest that future studies could examine a broad range of different conventional crop production systems in order to observe correlations between soil physical chemical properties and the presence and abundance of soil arthropods.